Estas directrices se difundirán a través de las oficinas regionales y las oficinas en los países de la OMS, los ministerios de salud, las organizaciones profesionales, los centros colaboradores de la OMS, otros organismos de las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales y asociaciones profesionales. Las directrices estarán disponibles en el sitio web de la OMS y también en forma de publicación impresa. Las versiones en línea estarán disponibles a través de los sitios web de los departamentos pertinentes de la OMS. Se celebrarán reuniones técnicas de la OMS con los interesados directos, para hacer públicas las recomendaciones y los productos derivados. También se difundirán regularmente las actualizaciones de las recomendaciones en las reuniones o congresos científicos a los que asiste el personal de salud materna y perinatal de la OMS.

Se elaborarán resúmenes de la evidencia respecto a determinadas recomendaciones, destinados a los encargados de formular políticas y los directores de programas y a los trabajadores de salud. Estos resúmenes de la evidencia, que resaltarán las recomendaciones y las cuestiones contextuales relacionadas con la aplicación, se elaborarán y difundirán en colaboración con los organismos FIGO, ICM, IPA, UNFPA, UNICEF y USAID.

El resumen y las recomendaciones de esta publicación se traducirán a los seis idiomas de las Naciones Unidas para su difusión a través de las oficinas regionales y en los países de la OMS.

Además, se publicarán varios artículos en los que se presentarán las recomendaciones y consideraciones clave para su aplicación, de conformidad con las políticas de acceso abierto y derechos de autor de la OMS. Los grupos, departamentos y asociados pertinentes de la OMS, como la Alianza para la Salud de la Madre, el Recién Nacido y el Niño (PMNCH, por su sigla en inglés), también participarán en este proceso de difusión.

La OMS, en colaboración con otros asociados, prestará apoyo a los grupos de trabajo nacionales y subnacionales para que adopten, adapten y apliquen las directrices. Esto incluirá la elaboración o modificación de políticas, directrices o protocolos nacionales existentes en consonancia con las recomendaciones de la OMS, así como de instrumentos para apoyar los procesos de adaptación e implementación. Esto también incluye un apoyo técnico a los implementadores locales de las directrices para la elaboración de materiales de capacitación e indicadores de calidad.